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martes, 6 de febrero de 2007

Tiempo de calidad...


Mi bisabuelo tiene casi 9o años, eso es lo que se supone... creo que son más...
El punto es, está muy enfermo... y cada vez que puedo, voy a visitarlo...
Mi familia por el lado materno, es absolutamente longeva, yo alcancé a conocer a su madre (mi tatarabuela) y me encanta eso!

Mi bisabuelo se llama Benito, ha inspirado un par de mis poemas, incluso con uno, gané unos juegos florales en el colegio (se llamaban asi porque mi profesora de Castellano alucinaba con Gabriela Mistral... y adoraba como yo escribía)

Hace dos findes estuve una media hora casi con él... ya no se levanta, y en su mente las cosas se confunden, tiene un leve alzheimer, y a veces no sabe quien tiene al frente... pero aun así, lo quiero mucho y adoro conversar con él, porque pese a no tener claro cosas del presente, de su pasado se acuerda perfectamente... ¡se los juro!

Aquí una foto con mi bisabuelo y mi bisabuela Ana, data de hace un par de años, pero los sentimientos que habían en ese minuto, claramente se mantienen…

Me encantaría llegar a la edad de mis bisabuelos con la misma sabiduría y la misma dignidad con que lo han hecho ellos… adoraría ser una abuelita de cabellos plateados, llena de nietos, y poder contarles mil historias…

1 respiros:

Andrée dijo...

Yo tengo mi abuela materna viva, tiene 85 años y vive sola, está muy bien. Ella se llama Aída y es mi gran patner en este viaje. Caminamos juntas, tomamos sol, conversamos, arreglamos el mundo y es mi gran alegría. Yo tb conocí a mi bisabuela, se llamaba Cruz y murió de 106 años y por decisión propia, un día que se cansó de vivir...
La familia de mi padre no es longeva, mi abuela murió en Francia de un ataque al corazón igual que mi abuelo paterno.
Qué lindo tu mensaje, creo que hay que valorar los años, hay que estar con nuestros abuelitos y dedicarles parte importante de nuestra juventud.
Somos las dos muy afortunadas de tener aún a nuestro abuelitos con nosotras. No te pierdas jamás esas conversaciones porque serán un maravilloso y vívido recuerdo.

Un abrazo grande.
xxxx
andrée burgat